El devoto puede pensar que debe alcanzar santidad, y no le falta razón, de hecho es un mandato del Padre: "Sed santos como Yo Soy santo".
Así cómo "Yo Soy" es el mismo Dios y solo Él lo es, así mismo es Él quien da esa santidad por medio de su Espíritu, pero entonces ¿Cómo es que nos dice que lo seamos nosotros?. Pues bien toda obra de Dios, aunque no siempre lo hace así porque precisamente es Dios, le gusta utilizar a los hombres. Los pasos debe darlos el ser humano, iniciar el camino que luego abandonado en Dios, Él será quien guíe al santo hacia su santidad, y así sucede en cada cosa.
Si oro "... no nos dejes caer en la tentación.." no creas que Él te va a librar y ya está. No. Depende de ti el iniciarte en ese esfuerzo para que Él haga el resto, porque tu intención debe estar en consonancia con tu oración.
Y es que en el esfuerzo está la santidad, porque nada más puede hacer el hombre al respecto. Como dijo el maestro "no hay santo sin pecado, ni pecado sin futuro" porque todo hombre tiende a dejarse influenciar por el pecado y cae, excepto el que todo lo puede, Jesús.
Esfuérzate en algo y lo conseguirás porque estás "hecho a semejanza de Dios", "nos hizo capaces de ser Hijos de Dios", esto es como el hombre Jesús de Nazaret, no hablo ahora de Jesús Dios, sino como quien no vino con todo su Poder como Dios, sinó cómo hombre a imitar para que tú hicieses lo mismo en casi todo lo que Él hizo... (excepto salvarnos y resucitar que solo lo pudo hacer Él con su majestad) ... que te parece.... y tú crees que lo de Él es inalcanzable... Jesús es uno en Dios, pero el hombre es uno en Jesús.
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